martes, 20 de julio de 2010

Capitulo 1


El mal clima típico de la ciudad les daba la bienvenida, bajo una lluvia persistente los chicos entraron rápidamente al auto que los esperaba a la salida del aeropuerto en completo anonimato, su equipo había hecho esfuerzos sobrehumanos para que su estadía en Londres pasara completamente inadvertida.

El viaje les tomaría más tiempo de lo provisto así que era mejor ponerse cómodos y esperar pacientemente a que el congestionado tráfico los dejara avanzar, poco a poco cada uno de ellos fue sediento ante el sueño, el único que aun continuaba despierto después de algún tiempo era Bill que observaba por la ventana curioso.

Al salir de la ciudad el paisaje había cambiado por completo atrás había quedado el caos para dar paso a hermosos y tranquilos paisajes, que fueron adormeciendo al chico con el pasar de los minutos. El lugar hacia donde se dirigían quedaba a tan solo cuarenta minutos en auto de Londres, pero daba la impresión de haber viajado por horas.  

Eso fue la sensación que tuvo Tom al despertar y ver a su alrededor el auto tomo un desvío de la carretera condujo por un pequeño paraje rodeado de árboles de pino a lo lejos se podía observar un edifico de color gris muy antiguo, tuvo la impresión de que esa era el lugar donde se quedarían durante su estadía en la ciudad.

La propiedad le pertenecía al  productor con quien trabajarían en su nueva gira, lo habían conocido meses atrás su disquera había hecho todos los arreglos para que trabajara con los chicos y su equipo, un hombre sumamente amable había congeniado con ellos casi desde el primer momento en conocerlos, no dudo en hospedarlos en su casa.

Era tan antigua como hermosa, rodeada de extensos bosques, jardines y un pequeño lago, el lugar era inmenso la llamaban Pollock House era una de las pocas edificaciones que aun continuaban en pie en esa villa.

El auto ingreso por los portones de hierro que se encontraban abiertos se detuvo frente al edificio en una pequeña plazoleta, la llovizna persistente no los dejo salir del auto, esperaron unos minutos el hombre salio a recibirlos llevándolos dentro del lugar.

No era tan ostentoso como pensaban pero aun así era imponente daba la impresión que el tiempo en ese lugar se había detenido para siempre, los llevo a recorrer un poco el lugar  después de que se instalaran  descansaran un poco tomaron el almuerzo en el jardín la lluvia ya había cesado no había un buen clima pero al menos les permitía disfrutar un poco del aire fresco.

El vivía con sus dos hijos  Edward, un joven de cabello castaño oscuro, piel muy blanca, ojos grises, algo desprolijo, apenas si tenia unos cuantos años más que los chicos había heredado el talento de su padre para los negocios y la música los acompañaba esa tarde, los chicos ya habían tenido la oportunidad de conocerlo estaría trabajando con ellos  haciéndose cargo de algunas cosas cuando su padre saliera del país por sus viajes de negocios.


                                                                             ♦♦♦♦


Ella llego el lunes por la tarde, había pasado el fin de semana en casa de su abuela en Paris ese día las clases en su colegio habían sido suspendidas por las festividades, esperaba a que el chofer le ayudara a bajar su equipaje del auto, abrió la puerta para que el pudiera pasar se detuvo en el lobby de la casa a revisar la correspondencia que ya llevaba apilada unos cuantos días.

Tomo lo que pertenecía colocándolo dentro de uno de los bolsillos de su abrigo se dirigió rumbo a la cocina con una pequeña caja de galletas en sus manos, entro en completo silencio interrumpiendo lo que Georg hablaba con Tom el chico estaba de pie junto a la ventana cuando tuvo la sensación de que alguien se acercaba.

Se quedo en silencio viendo como colocaba la caja sobre uno de los muebles de la cocina y se dirigía al refrigerador, Tom sentado en uno de los sofás cerca de la ventana giro su mirada hacia el a la espera de que terminara la frase.

El chico no dijo nada solo la señalo con la mirada en dirección donde se encontraba la joven de vestimenta extraña,  ni siquiera se había percatado de su presencia con una botella de agua en sus manos se acerco de nuevo a donde estaba la caja y los pudo ver, se quedo en silencio hasta que pudo recordar que su padre ya le había comentado algo sobre ellos.


Eh… Hola –Saludo algo confundida-

Ambos solo le sonrieron ninguno de las dos tenían la menor idea de quien era, su nombre era Helena la hermana menor de Edward, los cuatro la conocieron ese mismo día en la cena.

La palabra extraña encajaba a la perfección a la hora de describirla, porque había mucho de eso en ella, de cabello rubio, piel hermosamente pálida de rasgos finos delicados e inocentes que se fusionaban con su mirada gris, perturbadora y hasta macabra, esa particular combinación la hacia digna de alguna de las controvertida creaciones de Mark Ryden.

Tenía un aspecto antiguo, elaborado, con tintes dramáticos, de personalidad oscura y melancólica,  sentada al final de la mesa jugaba con su comida sumida en su mundo ni siquiera mostraba el menor interés de sumarse a la conversación solo se detenía de vez en cuando a observarlos por unos cuantos minutos.

Ser el blanco de la atención no era algo nuevo para ellos pero era imposible no sentirse incómodos  hasta intimidados ante su extraña mirada que seguía con detenimiento cada movimiento suyo

Helena que haces –Le susurro su hermano al oído-

Aunque algunas veces disfrutaba haciendo sentir miserable al que estaba frente suyo esa no era su intención esa noche, solo tenía un poco de curiosidad la chica sonrío desviando  la mirada hacia el.

Lo siento estoy aburrida

Creo que los estas asustando – Dijo sonriente-

Me puedo ir –Respondió entre risas-

Nos has comido nada

No me gusta esto

 Ve

Se disculpo educadamente salio a toda prisa de esa habitación parecía que no podía soportar ni un solo minuto mas, los chicos con total disimulo la vieron salir de ahí un poco aliviados quizás,  gesto que solo hizo que Edward riera mas.

Camino con tranquilidad por los pasillos que la llevaban a los jardines lo único que se podía escuchar era el sonido del tacón de sus botas golpear con suavidad el camino, necesitaba con urgencia escapar  antes de sucumbir ante la desesperación y el aburrimiento.

Temprano en la mañana mientras se servia un poco de te vio por la ventana algo que llamo su atención, venia lejos pero aquella figura vestida de negro que caminaba apresurada hacia la casa se le hacia familiar, con la taza entre sus manos salio de la cocina en dirección al lobby espero de pie paciente junto a la puerta a que se aproximara.

Que rayos hace? se pregunto al asegurarse que era ella, no había ninguna duda aun llevaba ese abrigo extraño de la noche anterior, bebió de su taza mientras abría la puerta, una ráfaga de aire helado golpeo el rostro adormecido del chico.

Que demonios estas haciendo?

Buenos Días – Se acerco beso su mejilla-

Sus pequeños y rojos labios estaban fríos como cubos de hielo contrastante con la piel calida de su hermano, aunque su rostro ocultaba con éxito algo que la pudiese delatar en sus ojos había un pequeño hilo de cansancio.

Estas bien? -El joven giro su mirada hacia el bosque-

Si… -Vio hacia la misma dirección- Porque?

No –La observo serio-  nada  ve a cambiarte que se te hace tarde para ir al colegio.

Helena – Llamo al verla subir por las escaleras-

Si

Estas segura de que esta todo bien

Lo esta  es solo…. Solo necesitaba caminar –Le sonrió-

Estudiaba en uno de los colegios de más tradición y prestigio de la ciudad generación tras generación de su familia  había sido educada en ese lugar, su padre tuvo serias dudas en que ella se adaptara, era solo cuestión de tiempo para que se metiera en problemas por esa manía suya de desconcertar a las personas.

Por lo general era una chica tranquila pero la mínima provocación hacia que se despertara en ella ese cinismo  y  gusto por causar controversia, a falta de escasos meses para que su ultimo año escolar terminara los problemas milagrosamente habían sido mucho menos de lo que el esperaba.

Se acerco en silencio tomo uno de los scones que habían en la bandeja tomo un pequeño trozo lo llevo a su boca, la mujer al verla junto a ella se sobresalto, volvió a ver hacia la puerta luego a ella, mientras se preguntaba en que momento había entrado.

Buenos días –Saludo risueña-

Por que le gusta hacer eso

Que

Eso!!  Aparecerse así de la nada, que susto me ha dado –Llevo su mano a su pecho-  

Jaja Ginger, sabes donde esta mi hermano?

En el jardín tomando el desayuno con esos chicos 

Mm..

Son adorables no le parece

Supongo –Hizo un gesto de indiferencia, mientras llevaba otro trozo a su boca-  

Puede llevarles esa bandeja mientras termino de preparar esto

Tomándola con ambas manos salio hacia el jardín, aquella mañana estaba de verdad muy hermosa pensó, fría ventajosa había algo de neblina entre los árboles le gustaba mucho esa imagen  tenia algo que la tranquilizaba le parecía sumamente hermoso.

Al llegar saludo amablemente colocando la bandeja sobre la mesa había un lugar vacío entre su hermano y Georg en el cual se sentó. Ese gesto en su rostro sabia perfectamente que algo se traía, busco a su padre con la mirada en la mesa pero no estaba mejor aun pensó la chica.


Tengo que pedirte algo  -Dijo entre susurros casi imperceptibles-

Que -No le había entendido nada pero al verla rebuscar entre los bolsillos de su uniforme tuvo una leve idea- Ah no no no no –Se negó de inmediato-

Por favor!! -Coloco cerca de él el pequeño sobre blanco-

La última vez fue más que suficiente, aun debes te tener algo no

La colección de invierno sale este viernes – Dijo en tono angustiante-

En todo ese lapso de tiempo Georg se quedo en silencio escuchando la conversación de ellos dos, le costaba entenderle ella solía acentuar mucho más su acento británico haciendo que su voz sonora… era un poco difícil de explicar no era melosa ni excesivamente dulce pero tenia algo encantador.  

Edward suspiro fastidiado fue ahí done ella supo que había aceptado, su rostro se ilumino con una sonrisa de esas que pocas veces le veía se levanto le dijo algo al oído que siempre lograba convérselo por completo al verla alejarse abrió el sobre leyó las instrucciones cuando contó el dinero se sorprendió.

Como lo hace- Pensó en voz alta quedándose pensativo-  


                                                                             ♦♦♦♦
Era la cuarta noche de lo que iba de la semana en la que escuchaba de nuevo esa melodía de piano, tenia la sensación de que la había oído en alguna otra ocasión pero no podía recordar donde, aquella suave triste y melancólica canción no era el hip- hop alemán que le solía gustar ni siquiera algo de su hermano o los otros dos chicos eso lo intrigaba, por que sentía que la conocía se pregunto acostado en su cama.

A pesar de la lluvia  de esa noche  podía oírla casi sin ninguna dificultad, no le molestaba en lo absoluto al contrario las veces que la escuchaba había podido conciliar el sueño mucho mas fácil de lo usual, pero si aumentaba su curiosidad quería saber como o por que sentía conocerla.

Tomo de la mesa contiguo a su cama su celular vio la hora pasaban ya mas de las tres de la mañana apenas si tenia unos cuantos minutos de haberse acostado los mismos que tenia esa melodía sonando, al intentarlo colocar de nuevo sobre la mesa este se callo al suelo quedando justo detrás de ella, se incorporo sentándose sobre su cama, para moverla  y tomar su celular.

Al hacerlo esa tonada que tanto le intrigaba se pudo escuchar mejor, el sonido provenía de un conducto que estaba detrás de esa antigua mesa al verlo supo que no lo habían usado en años había oxido en los hierros de la mampara que lo cubría. Se acerco curioso e intento moverla, fácilmente la pudo quitar dejando al descubierto una capa de telarañas y algo de polvo el sonido ese sonido se hizo más notable.

Su habitación, la de Bill y los otros dos chicos estaban ubicadas en el segundo piso de ese lugar y si sus cálculos no le fallaban la suya en particular debía de estar sobre las estancias que había visto contiguo al lobby principal, tomo una de sus suéteres se abrigo bien bajo hasta la primera planta, lo único que se escuchaba la insistente lluvia solo eso.

Intento abrir una de las puertas esta cedió fácilmente encontró un par de lámparas de luces tenues encendidas dejándolo ver lo que parecía ser una biblioteca o un despacho cerró la puerta despacio, todo ahí era como el resto de la casa antiguo y un poco extraño para su parecer.

Camino despacio mientras escuchaba la música observando las paredes que estaban cubiertas de muebles interminables llenas de libros, cerca de la ventana había un escritorio una chimenea, una hermosa alfombra que cubría todo el piso de la habitación más mucho muebles antiguos y algunas pinturas de personas que parecían seguirlo con la mirada con cada paso que daba.  

Detrás de una cortina marrón se encontró una puerta entreabierta, de ahí provenía las notas que pertenecían a esa melodía que lo trajo a ese lugar, al dar un paso para entrar el crujir de la madera anuncio su presencia, estaba todo oscuro lo único que llevaba algo de luz a ese pequeño espacio era una vela blanca que aun estaba encendida sobre el piano era como si alguien hubiese estado ahí, quizás solo segundos antes de que el llegara.


Tom se acerco estaba completamente seguro que esa melodía provenía de el piano y no de esa extraña caja  de música que estaba sobre el, ese sonido metálico  no podía ser perceptible en su habitación era casi imposible pensó.

El chico tomo asiento intento tocar algunas notas que aun estaban frescas en su memoria fueron solo unas pocas, un conducto igual al que había en su habitación lo distrajo  podía asegurar que era el encargado de conducir el sonido hasta ella.

Valla lugar –Dijo en voz alta y sonrío-

Estuvo sentado ahí unos cuantos minutos recordando sin éxito donde la había escuchado, le dio cuerda una vez mas a la caja de música, cerro la tapa del piano antes de salir apago la vela dejando en completa oscuridad esa habitación.

3 comentarios:

  1. Ohh!! me gustaa

    me quede LOL lo del piano fuee *.*

    me gusto tengo curiosidad, quiero leer el segunda.

    ^^

    ResponderEliminar
  2. wowwww me quede sin palabras...
    y despues la musica agrega mas dramatismo
    esta increible bueno voy a estar pendiente del fic.
    saludos

    ResponderEliminar
  3. MARAVILLOSAMENTE ENCANTADOR!!!!.. este capitulo me ha encantado...que manera de comenzar...

    es que esta historia ahora me encanta mas que antes... siento que asta ya adoro a Helena...

    un capitulo excelente....FELICIDADES Octubre....y es un honor para mi leerte..

    besos ENORMES para ti!!!

    ResponderEliminar