sábado, 14 de agosto de 2010

Capitulo 6


Partieron a primero hora del día, los primeros rayos de sol aun no aparecían les esperaba un largo viaje era mejor salir temprano, al llegar al aeropuerto lo encontraron prácticamente desierto esperaron su vuelo en una pequeña sala, el frio que  hacia era casi insoportable a pesar de que las nevadas habían cesado los últimos días.

Al llegar a Edimburgo las cosas no mejoraron mucho una fría, lluviosa y gris ciudad los esperaba el paso por ella fue prácticamente nulo como era su costumbre los chicos lo único que vieron de la cuidad fue lo que observaban por la ventana de camino en el auto pero les pareció hermosa.

Fue un trayecto corto del aeropuerto hasta el puerto donde abordarían el primer ferry del día que los llevaría hasta Highlands, el viaje les resulto divertido hasta podían decir que muy “normal” para ser ellos. El sol poco a poco empezaba a rayar a medida que avanzaban las horas mas aun así no llevaba nada de calidez.

Al menos serian cuatro horas de viaje pero era lo menos que les importaba, al verlos  daba la impresión de ser chicos de colegio en plena excursión escolar, nada de horarios ajustados o estrictamente planificados, ni de su sequito de personas que solían viajar con ellos ni siquiera iban  necesitar seguridad era como un pequeño anticipo de sus tan esperadas vacaciones de fin de año.

El ferry avanzo lentamente rompiendo de a poco los fragmentos de hielo del lago que ya empezaba a congelarse, media hora después habían abandonado por completo la ciudad dando paso a paisajes de enormes montañas verdes, colinas con ruinas algunas ovejas y bruma de mar. 

♦♦♦♦


Estaba mas pálida de lo normal algo tensa  hasta nerviosa desde que abordaron  había tomado asiento en una de las cabinas, escuchaba algo de música mientras pensaba en muchas cosas y a la vez en nada concreto, golpeaba una y otra vez con la parte  trasera de sus botas el viejo asiento de madera donde se encontraba sentada. 

El lugar estaba prácticamente vacio a excepción unas cuantas personas que se encontraban algo alejadas de ella y una mujer de avanzada edad que la observaba cautelosamente, tras un movimiento brusco del ferry Helena decidió salir en busca de aire fresco.

El chico llego minutos después un tanto fastidiado de ver montañas y agua a donde quiera que observara, se dejo caer en el asiento mientras escuchaba su música y veía por la ventana estaba exhausto apenas si había dormido un par de horas, era cuestión de acostarse en ese asiento quedarse dormido en segundos pensó.

En medio del volumen estridente de su música escucho que alguien le hablaba, se quito uno de los audífonos observo a su alrededor.

Se acaba de ir – Le dijo una mujer de avanzada edad- Estaba sentada muy cerca de él. Disculpe no la escuche.

Se acaba de ir la chica – Volvió a repetir- La observo con un gesto de no comprender muy bien de que le hablaba.

La chica, la de rostro muy hermoso y  pálido estaba con ustedes hace poco más de una hora.

Ah! Ella si –Le sonrió-

Creo que no se sentía muy bien, se fue por allá –Dijo señalando el lugar- Deben ser solo nervios. Estos viejos trastos se mueven un poco pero nunca ha pasado nada de que lamentar. Se han quedado varados unas cuantas veces pero a mi edad creo que no hay problema esperar -Ambos rieron tras el comentario-

El joven bajo el volumen de su música, la busco con la mirada no debía de estar muy lejos pensó.

Solo son nauseas, en la cafetería puede encontrar algo de te, no es el mejor del mundo pero al menos se deja beber –Dijo la mujer al verlo algo preocupado- 

Gracias –Le agradeció con una sonrisa-

De nada cariño

Lo vio buscar algo en los bolsillos de su enorme pantalón mientras caminada en dirección tras indicarle donde encontrar el lugar. Después de buscar por un tiempo en las afueras del ferry en la dirección que aquella señora tan amable le dio la encontró algo de razón tenia ella aquellos “trastos viejos” se movían algo brusco al quebrar el hielo a su paso.

♦♦♦♦

A pesar de que trataba de calmarse le era imposible que los recuerdos no volvieran a ella, eso acrecentaba su temor de que algo pudiera suceder  reposo su cabeza sobre sus brazos que iban sujetos a la baranda mientras observaba las montañas su padre tenia razón no recordaba absolutamente nada de su viaje anterior. Un movimiento mas este fue más fuerte se sujeto de esa baranda con todas sus fuerzas cerro sus ojos.

Estas bien- Pregunto el- Llevaba entre sus manos un pequeño vaso desechable que contenía te o al menos lo que quedaba, había derramado sobre el una buena cantidad.
 
Se sentó junto a ella coloco el vaso en el asiento limpio sus manos en su ropa, Helena lo observo por un momento luego desvió su mirada hacia lo que parecía ser un bolso, metálico tomo un par de guantes que probablemente no la protegerían del frio mas si de sensaciones que no estaba dispuesta a percibir de nuevo.

Gracias – Dijo al tomar el vaso de las manos del chico-

Estas bien

Solo asintió con su cabeza mientras bebía  por cortesía el te, al sentir el sabor en su boca disimulo casi con éxito un pequeño gesto.

Tan mal esta –Pregunto Tom sonriendo-

Bueno… No esta tan mal

Su rostro siempre solía estar inexpresivo solo reflejaba una calma absoluta por alguna razón le resultaba molesto, a no ser por su mirada juraría que estaba muerta en vida como si nada o nadie pudiese arrancar de ella una emoción por más simple que esta fuera. Pero esa mañana su rostro que lucía más pálido de lo normal dejaba ver algo que le resultaba extraño en ella… Emociones muchas emociones.

Entre la interminable lista de cosas que Helena odiaba, el sentirse vulnerable estaba entre las primeras, para nada le ayudaba que el estuviese ahí, en ese momento solo acrecentaba el desastre que había dentro suyo, era inevitable para ella absorber como si fuese una esponja  eso que aun no comprendía de él.

Tras el último movimiento del ferry se alejo en busca de soledad era lo que necesitaba para al menos calmar un poco lo que sentía, mientras caminaba sin rumbo ubico el baño  se encerró en el tomando asiento dejo que todo saliera, sus pequeñas manos temblaban como papel, mientras su corazón se aceleraba con el solo hecho de recordar lo sucedido esa vez,  su respiración se volvía incontrolable, el miedo la había dominado por completo, fue ahí cuando se pregunto por demonios había aceptado venir.

Se encontró con Edward al salir, la esperaba paciente mientras jugaba con su bolso sabía que no era necesario decirle absolutamente nada algunas ocasiones eso estaba bien, el chico jugaba entretenido como si tratara de un juguete con su particular bolso.

Puedes tener cuidado. Vale más de lo que ganas en una semana – Dijo arrebatándolo de sus manos, para colgarlo en su muñeca- 

En eso gastas tu dinero en juguetitos- Le dijo dándole un golpe suave al bolso-

No son juguetitos,  además mi dinero mis reglas no?

Estas bien? –quiso saber con un tono serio-

No –Respondió más sincera que nunca-

Algunas veces hablar no le ayudaba a Helena a solucionar nada solo le traía más preguntas que respuestas, pero solo el hecho de tenerlo cerca poder percibir esa tranquilidad que siempre emanaba la ayudaba. Se sujeto de su mano con cuidado respiro un poco más tranquila mientras caminaban, tratada de descifrar por que algunas veces solía confundirlo con su hermano y otras simplemente no soportaba su presencia.

♦♦♦♦

El simple hecho de llegar a tierra firme acabo con sus temores por completo, un poco de color llego a su rostro una tranquilidad momentánea la embargo. Llevaban prácticamente toda la mañana de viaje un par de horas más en auto ya le parecía insoportable.

Al poco tiempo de ir viendo por la ventana se quedo dormida sin percatarse si quiera sobre el hombro de Gustav que viajaba junto a ella el chico solamente sonrió un poco mientras intentada acomodarla sin que se despertara, había algo en ella que le resultaba dulce con un cierto aire de inocencia.

Abrió sus ojos un poco por un momento había olvidado donde se encontraba, su mirada gris se ilumino al observar a lo lejos el lugar donde se hospedarían esos días, su abuelo le había hablado tanto de ese lugar lo describía como algo inigualable demasiado perfecto para ser verdad.

Pero ahí estaba no había obviado ni un solo detalle la antigua casa había sido construida sobre un risco junto al mar, plasmaba a la perfección el paisaje escocés sencillamente maravilloso y fascinante cargado de nostalgia mas la vista costera que le hacía contener su respiración.    

Valla! Es ahí donde vamos –Pregunto Gustav fascinado-

Si -Respondió Helena-

Es hermoso

Helena solo asintió con su cabeza no tenia palabras esta vez si no las tenía, la nostalgia la invadió quizás era esos días donde se encontraba demasiado sensible todo a su alrededor la afectaba más de lo que debía o simplemente lo extrañaba.  

Su abuelo había sido una de las personas más importantes en su vida perderlo no fue fácil al menos con él fue diferente tuvo el tiempo para hacerse a la idea que llegaría el día que ya no estuviera junto a ella, cosa que hubiese deseado con su madre.

Bajo del auto en completo silencio observo curiosa todo, sonrió ampliamente al sentir la brisa en su rostro había sido un día tan extraño pasar de una emoción extrema a otra  de la desesperación de sentirse vulnerable, a una nostalgia extrema y de la felicidad que le traía aquel mágico lugar, era como si la esencia de aquel hombre encantador estuviese presente ahí.

♦♦♦♦


Querida BB

Lamento no haber escrito antes es solo que no he tenido tiempo. Supongo que de nuevo decidiste viajar a otro lugar ya que mis mensajes no han sido respondidos.

Necesito pedirte algo, por favor no te niegues ya ha pasado mucho tiempo lejos creo que no soporto un día mas así, ella ya no está aquí ni el tampoco algunos días simplemente siento que voy a enloquecer, por favor ven a verme.

Hay algo que necesito hablarte creo que solo tu entenderías o al menos me ayudarías a encontrar una razón lógica de por qué todas estas cosas me suceden.

Por cierto estoy Escocia el abuelo tenía razón es hermoso recién llegue esta tarde, creo que yo no hubiese escogido mejor lugar para depositar sus restos, esta junto a la venta de ahí puede ver el mar.  

Papa y Edward están bien te manda saludos y besos. Yo también lo estoy créeme es solo que algunas veces siento que mis fuerzas se acaban.

PD: Gracias por el bolso es realmente hermoso… Por alguna razón siento que alguna vez me perteneció es extraño lo sé jamás lo había visto pero apenas lo tuve en mis manos lo sentí así  

Te quiere Helena

6 comentarios:

  1. OHH!! subiste capii xDD

    me gustó el capitulo sobre todo lo de Tom! ;3

    aunque es extraño pero me encanta, por sierto la canción de evanescence me encantaaa!!! xD le da un aire sueper ooh! xD :3

    ResponderEliminar
  2. Como siempre me encanto el capitulo, me parece fascinante como escribes, todos los dias religiosamente reviso el blog para saber si publicaste jiji de verdad espero con ansias el siguiente y pues solo me queda felicitarte, no leemos pronto, bye

    ResponderEliminar
  3. No saben lo que me gusta leer sus comentarios es lo que me anima a seguir escribiendo.

    Muchísimas Gracias por tomarse el tiempo para leerme y comentar.

    Prometo subir pronto Matve te entiendo a mi me pasa igual con los fics que leo.

    Lo de Tom pues si esta niña Helena es muy extraña pero no Noe, no le tiene FOBIA.

    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Jajajaja Yo aun sigo pensando que le tiene fobia o algo no entiendo por que reacciona así, por que no lo soporta ver???? Ya quiero saber.

    Kusess amiga sube pronto!

    ResponderEliminar
  5. EEss un relato mmagníficoo ¡¡¡¡
    con una ddescripciónn estupenda ...

    SSiguee asi Octubre ...

    - Besos -

    ResponderEliminar
  6. ya dije que amo este fic????

    es maravilloso como lo describees...

    por cierto...

    ya mencione que escribes increiblemente???

    me encanta el bolso de Helena...

    ResponderEliminar