domingo, 24 de noviembre de 2013

Capítulo 50

                            



Llevaba siendo ignorado poco más de quince minutos, lo único que necesitaba era un poco de información. Era la segunda vez que iba en esa semana y aún no había obtenido nada.

Suponía que había salido de la ciudad pero al menos hubiese dicho algo o dejado alguna nota quizás.

—¡Señorita!—Llamo por enésima vez.

Sólo obtuvo por respuesta un gesto con su dedo índice pidiéndole un minuto más. Exasperado maldijo por lo bajó. 

Camino por el lobby y se invitó el solo a pasar. El ascensor al final del pasillo lo llevo hasta los pisos superiores.

La puerta blanca de su habitación estaba entreabierta, toco un par de veces más nadie respondió.

El recibidor estaba oscuro y silencioso, sólo una pequeña luz se filtraba bajo la puerta de su habitación.

—¿Helena?—Llamó.

El chico al otro lado no respondió 


^^^^

—¿No has hablado con Edward aún?

—No

Mantenía la vista sobre la ventana del auto, viendo como las líneas que demarcaban la carretera se fusionaban entre sí.

No dejaba de pensar porque demonios había aceptado que se hiciera cargo de ella como si fuese una pequeña niña.

Porque necesitaba como si fuese una adicta, aquella embriagadora sensación de sentirse protegida.

Quizás porque le recordaba momentos de su vida donde había sido feliz o porque le recordaba a su madre y eso le resultaba extraño.

—¿Paso algo?—Preguntó Tom. Al apagar el motor del auto.

—¿Porque haces esto?—Arremetió de inmediato—¿Ya sabes todo esto?

—No es obvio—Respondió altivo mientras encendía un cigarrillo en su boca.

Helena sintió sus entrañas hervir más esta vez no era por su tacto, le recordó a su hermano, cuando utilizaba aquella frase cuando le pedía que le explicase algo. 

—Sólo quiero que estés bien— Mascullo sin qué pudiese oírlo, al verla salir.

Helena no había sido dotada para comprender porque alguien ajeno a ella haría eso.

Alguien que no fuese de su pequeño círculo cercano preocupándose por ella parecía no ser muy sensato.

Como tampoco parecía ser muy sensato aceptarlo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario